Que Barcelona se masifica en navidad no es ninguna novedad. Año tras año, el paseo de Gracia se llena de paseantes los fines de semana (ahora, con el éxito de las luces, todavía más) y en general todo el centro de Barcelona se llena de vecinos y visitantes que buscan o encontrar su regalo ideal o visitar alguno de los mercados y pesebres hay por la ciudad.
Evidentemente, el tráfico no ayuda a despejar las zonas más concurridas. Si en Madrid ya hace años que el centro se peatonaliza y se corta para las fiestas, ahora una entidad reclama algo similar para Barcelona: restringir el tráfico durante las fiestas de navidad.
Lo ha pedido Eixample Respira, una entidad que ha solicitado al Ayuntamiento de Barcelona la implementación de restricciones de tráfico en las zonas más concurridas del centro de la ciudad durante las fiestas navideñas.
¿Qué calles quedarían cortadas?
La propuesta incluye convertir en áreas exclusivas para peatones espacios como el paseo de Gràcia, la rambla Catalunya, la plaza Catalunya, los laterales de la Gran Vía y los principales ejes comerciales de los barrios durante las tardes, fines de semana y festivos.
Según la entidad, estas medidas permitirían a los barceloneses disfrutar mejor de las fiestas en un entorno seguro y libre de atascos y contaminación. Además, aseguran que la congestión y el ruido generados por el aumento de tráfico navideño afectan tanto a vecinos como a visitantes, complicando la movilidad y el disfrute de las actividades y las compras típicas de estas fechas.
El problema de passeig de Gracia y sus luces de navidad
Eixample Respira también ha señalado un problema recurrente: las luces de Navidad, sobre todo, las de Passeig de Gràcia. En su opinión, muchas de estas instalaciones están diseñadas para ser apreciadas desde vehículos motorizados, lo que provoca situaciones de peligro cuando los peatones ocupan la calzada para admirarlas o tomarse fotografías. «Esto genera conflictos innecesarios y pone en riesgo la seguridad de los transeúntes», advierten.
La entidad recuerda que iniciativas como el Sant Jordi sin humos o el programa Obrim Carrers, aplicado en ejes como Sants-Creu Coberta o Gran de Gràcia, han demostrado la eficacia de restringir el tráfico durante eventos multitudinarios.
Además, consideran que extender estas restricciones a los principales ejes comerciales durante la Navidad ayudaría a descentralizar las actividades navideñas y a promover el comercio de proximidad, favoreciendo tanto a los vecinos como a los pequeños comerciantes.
¿Quién es Eixample Respira?
Ellos mismos se definen como «una plataforma vecinal, apartidista, del distrito del Eixample de Barcelona que compartimos una gran preocupación por la mala calidad del aire que respiramos diariamente, los niveles de ruido y la alta ocupación del espacio público por parte de los vehículos privados».
Control de tráfico durante navidad
Por su parte, el Ayuntamiento de Barcelona ha activado la Operación Navidad, un plan que estará vigente hasta el 7 de enero con el objetivo de garantizar niveles óptimos de seguridad y convivencia. Este dispositivo incluye el refuerzo de la presencia de la Guardia Urbana, que colaborará con los Mossos d’Esquadra, así como la ampliación de las frecuencias del transporte público y un incremento de la limpieza en los espacios públicos más transitados a partir del 6 de diciembre.