
Seguramente ya lo hayáis notado esta noche: las temperaturas han subido. No, no habéis sido vosotros ni vuestro edredón invernal que todavía sigue ahí, sino la primera noche tropical de un verano que promete ser intenso.
La culpa la tiene una masa de aire sahariano excepcionalmente cálido, que ha provocado un ascenso súbito de las temperaturas, con subidas de hasta 5 grados en solo 24 horas en la capital catalana, donde los termómetros han pasado de los 23 °C del martes a superar los 27 °C este miércoles, y se prevé que puedan alcanzar los 30 °C en las próximas horas.
Avisos activados, más de 30º y noches tropicales en Barcelona
A causa de esta súbita subida el Servei Meteorològic de Catalunya y la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) han activado avisos amarillos por temperaturas extremas, especialmente en las provincias de Lleida y Tarragona, donde se han registrado los valores más altos de la jornada. Municipios como Benissanet (Tarragona) han alcanzado los 36,4 °C, mientras que Vinebre (35,8 °C), Seròs (35,3 °C) y Ascó (35 °C) han superado ampliamente los 35 °C, cifras propias de pleno verano y muy por encima de lo habitual para un final de mayo.
En el resto de Catalunya, decenas de localidades han superado los 30 °C, muchas de ellas por primera vez en lo que va de año. En El Masroig se han registrado 34,6 °C, en el Pantà de Riba-roja y Alcarràs 34,2 °C, y en Lleida capital 34 °C.
La situación no solo afecta a las máximas diurnas. Se prevén noches tropicales, con mínimas que podrían no bajar de los 20 °C en Barcelona y otras zonas costeras, dificultando el descanso y aumentando el riesgo de golpes de calor, especialmente entre los colectivos más vulnerables. Según la AEMET, las temperaturas mínimas entre viernes y domingo estarán entre 5 y 10 grados por encima de lo normal en amplias zonas, consolidando este episodio como uno de los más extremos registrados en un mes de mayo7.
¿Hasta cuándo durará el calor?
Los avisos por calor seguirán activos, al menos, hasta el fin de semana. Los modelos meteorológicos prevén que el pico de este episodio se produzca entre viernes y sábado, cuando los termómetros podrían batir récords históricos en el interior de Catalunya, especialmente en el Segrià y la Ribera d’Ebre, donde se esperan hasta 38 o 39 °C.
A partir del lunes, la entrada de una masa de aire más fresco del Atlántico aliviará la situación, aunque las temperaturas seguirán siendo altas para la época. No obstante, no se descarta un nuevo repunte de calor a partir del jueves siguiente17.
Este episodio de calor, que afecta a gran parte de España, está considerado por la AEMET como uno de los más graves y extraordinarios de los que se tiene constancia en un mes de mayo, con anomalías térmicas de hasta 10-15 grados por encima de lo normal en algunas zonas y que ha obligado a activar avisos en siete comunidades autónomas.