Deja de imaginarlo: el proyecto de crearlo en Barcelona existe y tú puedes ayudar a que sea real.
“Necesitamos un montón de pasta”, dice Irene Velasco -no sé muy bien si con entusiasmo, nerviosismo o escepticismo, seguro que no es pesimismo-. Un montón de pasta es una medición cualitativa que traducida a cifras reales asciende a algo menos de medio millón de euros. Con lo que sí, afirmo para mis adentros: un montón de pasta.
Irene Velasco, vaya antes la persona que crea el negocio que el negocio en sí, es la impulsora de Home: a dream come true. Aunque hay más gente detrás de la idea, Irene se posiciona así: “Somos dos personas trabajando full time, Daniel y yo. Yo soy la loca que está haciendo la mayoría de las cosas. Detrás tenemos un pequeño grupo de gente que nos apoya y opina”.
Home: a dream come true (ahora sí) es un proyecto que se puede definir a partir de una ficción sobre cómo sería el día en el que estuviera acabado. Personas que habían sido excluidas de la sociedad caminan -bandeja o libreta en mano- por lo que parece un decorado creado por JK Rowling. No, no por lo que parece. Por lo que es. “Personas sin hogar” (como dice Irene) danzan como actores, como magos o como camareros por Las tres escobas -el bar de la saga-.
A diferencia de los negocios ambientados en Harry Potter que triunfan en Barcelona (véase la tienda dedicada al universo Potter o el Coffe Shop o la gente que juega a Quidditch en el parque), detrás de éste no hay una finalidad lucrativa.
¿La forma de ayudar? El proyecto está todavía en una frase prematura. Las donaciones se podrán hacer en Kickstarter el mes que viene -aunque el target de esta plataforma de crowdfunding es preminentemente de habla inglesa- y a través de Facebook -enfocado al público local-.