Tras varios meses en este emblemático edificio del Passeig de Gràcia, la Casa Amatller, Dragones y Modernismo: la experiencia inmersiva llega a su fin. Concretamente, este domingo se despedirá de la ciudad condal. Pero aún puedes conseguir tu entrada y venir a visitarla. ¡No deberías perdértela!
La exposición nos ofrece casi 1.500 metros cuadrados de recorrido. Encontraremos una sala inmersiva 360º, una sala de realidad virtual, instalaciones digitales e interactivas en una sala familiar, escenografías y otros recursos tecnológicos. Todos ellos, combinados con una museografía tradicional que cuenta con objetos personales de la familia Amatller, de sus viajes y su vida íntima.
La experiencia digital del Centre d’Art Amatller nos hará viajar a la Barcelona del 1900 y descubrir los orígenes del Modernismo catalán, uno de los movimientos artísticos más importantes.
Dentro de ‘Dragones y Modernismo’ destaca la Sala de los Dragones, y es que éstos forman parte de la iconografía de Barcelona y de la cultura catalana. Dicen que Barcelona es la ciudad del mundo con más dragones por metro cuadrado. Sin ir más lejos, aquí en el Centre d’Art Amatller podemos encontrar más de 60. Uno de ellos representa la lucha de Sant Jordi contra un gran dragón.
Nos adentramos en una casa con historia y pionera en el Modernismo catalán
La emblemática Casa Amatller es un edificio propiedad original del industrial del chocolate Antoni Amatller, que a día de hoy conserva la decoración y el mobiliario original.
Es el primer edificio modernista del Eixample y una de las obras más importantes de esta época. Fue diseñada por el arquitecto Josep Puig i Cadafalch por encargo de la Familia Amatller y se convirtió en un ejemplo de la nueva estética del Modernismo catalán, seguida por otros edificios modernistas emblemáticos como la Casa Batlló, la Casa Milà o el Palau de la Música Catalana.
Su fachada, típica del Eixample, es ejemplo de cómo Puig i Cadafalch reinterpretó varios estilos arquitectónicos como el románico y el gótico catalán. El resultado es una fachada llena de simbolismo y donde encontramos múltiples elementos decorativos. Aunque, sin duda, un elemento que la convierte en una de las fachadas más admiradas es su remate escalonado. Éste nos recuerda a la arquitectura medieval del norte de Europa.
Tampoco podemos dejar de hablar de las colecciones que alberga la Casa Amatller, y es que es la única casa museo de Barcelona que conserva una extensa colección de valor artístico excepcional.
El interés que sentía Antoni Amatller por las artes decorativas, el vidrio y la fotografía explican que hoy en día encontremos en la casa auténticas joyas artísticas. Por ejemplo, un retablo románico del 1200 aproximadamente, una tabla hispana flamenca de Bartolomé Bermejo, bodegones barrocos y un cuadro de Ramón Casas. También varias fotografías electricistas de Rogent, joyas contemporáneas de Lalique y colecciones de vidrio arqueológico de incalculable valor cultural e histórico.
En definitiva, la Casa Amatller en toda su totalidad es de una riqueza cultural inigualable y, con su nueva exposición inmersiva en el recién inaugurado Museu Digital, un plan ideal para sumergirnos por los orígenes de nuestra ciudad de forma interactiva, innovadora y sorprendente.