2020 nos ha deparado una nueva reformulación del refrán que acusa a quien ve la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. ¿Por qué? El ejemplo de uno mismo cuando hacía un viaje a cualquier ciudad europea y no se perdía ni la visita al museo de embarcaciones del siglo XII. Mientras tanto, ni siquiera hemos visitado uno de los edificios más emblemáticos de Barcelona como es el caso de la Casa Amatller y otros tantos lugares.
Lugares como casas. Concretamente Casas Singulares, el proyecto que pone sobre la mesa la posibilidad de visitar algunas de las casas museo más desconocidas del patrimonio catalán. Un proyecto que nació en 2010 y que pretende “explicar la historia de Barcelona a través de las casas de sus protagonistas”.
El razonamiento es el siguiente: está ahí y lo que solemos decir es que tarde o temprano lo vamos a visitar, ¿no? Pues ese temprano es ya. Ha llegado el momento de conocer tu ciudad: en Navidad, cuando todas estas casas son decoradas apropiadamente con las fechas que vivimos.
Casa Amatller
En Paseo de Gràcia, 41 está uno de los edificios modernistas más espectaculares de Barcelona. Remodelado por el mítico Puig i Cadafalch, la Casa Amatller fue la casa del industrial chocolatero Antoni Amatller.
Lleva toda la vida entre las fachadas de l’Eixample (literalmente: toda tu vida –salvo que tengas 120 años–) y ahora ha llegado el momento de hacer una visita y recibir, además, un dulce obsequio. Todo ello, claro, con una espectacular decoración navideña.
Passeig de Gràcia 41
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La Casa Rocamora
Escultura, cerámica de alcora, muñecas, autómatas y una serie de objetos que parecen sacados de una narración de Eduardo Mendoza. La Casa Rocamora, en la zona noble de Barcelona, es un espectacular palacete isabelino del que no todo el mundo sabe de su existencia… hasta ahora. El mejor momento para visitarla, además, es Navidad: la decoración de la que hace gala no deja indiferente a nadie.
Carrer de Ballester 12
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El Palau Baró de Quadras
No se entiende Barcelona sin el modernismo y no se entiende el modernismo sin Josep Puig i Cadalfach. Uno de los edificios más desconocidos y más espectaculares del modernismo es el Palau Baró de Quadras. En plena Diagonal está este edificio que fue declarado Monumento Histórico Artístico de interés Nacional en 1976.
Avinguda Diagonal 373
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La Real Academia de Bellas Artes
Igual que hay que plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo, en un segundo escalón está la visita a la Real Academia de Bellas Artes. Este lugar es el continuador de uno de los primeros museos (la escuela de la Lonja) que existieron en Cataluña. No está entre los museos más conocidos de Barcelona, pero sí entre los imprescindibles.
Passeig d’Isabel II, 1 (Casa Llotja de Mar)
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La Biblioteca Arús
La Biblioteca Arús, que está considerada uno de los mejores centros de investigación en masonería, tiene una gran peculiaridad: entre sus parees alberga una colección de Sherlock Holmes. Y eso (la mayor colección privada dedicada a la figura de Sherlock Holmes) es precisamente lo que vas a poder visitar en esta emblemática biblioteca barcelonesa.
Passeig de Sant Joan 26
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