El verano está a punto de zarpar para dar paso al fresquito otoño y aunque el mundo se empeñe en ponerte triste, sabemos cómo hacer que abraces septiembre con una sonrisa de oreja a oreja.
Sabemos que la vuelta a la rutina y el síndrome postvacacional son los motivos principales por los que estos días estás de morros. Es duro, pero la mejor forma de afrontarlos no es estar quejándote las 24 horas del día, sino gritar la palabra mágica que nos devuelve al buen rollo: ¡PLAYEEMOS!
Sí, septiembre es el mejor mes para disfrutar del mar. Las playas se vacían, hace mejor tiempo y después de un duro día haciendo cosas, se disfruta más el tumbarse a escuchar el sonido de las olas.
Ésta es una manera muy guay de despedir el calor, pero nosotras no queremos limitarnos a un guay, sino al plan definitivo para desconectar de todo: una cata de bebidas en alta mar.
Piénsalo ¿Cuántas veces al pasear por el Port Olímpic has pensado en subirte a uno de esos barcos y navegar hasta cansarte? En alta mar puedes hacer lo que quieras. Por unos momentos, estás en una especie de “Nunca Jamás” en el que todo es tan infinito como el horizonte que se dibuja a lo lejos. Creednos, no hay nada más mágico que contemplar el atardecer rodead@ de agua mientras te tomas una bebida refrescante con J&B.
Después de este instante mágico, nada volverá a ser lo mismo. Muchas veces, ante una situación difícil como puede ser la vuelta a las obligaciones, lo mejor que puedes hacer es alejarte de los problemas y disfrutar del momento. Estar en altamar es perfecto para eso, porque estar en medio de la nada tiene un algo especial que hace que te estreses menos y lo veas todo claro de verdad, sobre todo el tiempo que dure el paseo…