Más de la mitad de las personas que viven en Barcelona son mujeres, en concreto, el 52%. Así lo ha afirmado el estudio «El gènere en xifres. Condicions de vida de les dones i desigualtat de gènere a la ciutat (2024)» publicado por el Ajuntament de Barcelona.
Este estudio, que pretende conocer a la población desde una perspectiva de género, se elabora cada cinco años con datos oficiales de distintos organismos como la Oficina Municipal de Datos o la Agencia de Salud Pública. A partir de estos, se estudia las condiciones laborales, de salud, de vida o de movilidad.
La pobreza tiene cara de mujer
El informe del Ajuntament de Barcelona destaca que las mujeres de la ciudad viven más solas, son más pobres y cobran menos que los hombres. En concreto, el riesgo de pobreza es del 40% entre la población femenina, en comparación con el 29% de los hombres.
En cuanto a la pobreza salarial, las mujeres tienen menos presencia, pero más precaria en el mercado laboral. El 26,4% de las mujeres trabajan a tiempo parcial, en comparación al 12,9% de los hombres, y la brecha salarial ya supera el 17% en la Ciudad Condal, en concreto, 7.000€ anuales de diferencia. Esto, en un futuro, puede comportar más precariedad, ya que, por ejemplo, las pensiones serán más bajas.
También hay más mujeres que viven de alquiler y menos en propiedad, así como también sufren un 3% más de pobreza energética.
Las tareas del hogar siguen siendo femeninas
A pesar de que las tareas de cuidados, según confirma el informe, están cada vez más valoradas, estas siguen cayendo en manos de las mujeres. El 59% de ellas dedica más de dos horas diarias a estos trabajos no remunerados, frente al 35% de los hombres. En este sentido, actualmente, solo el 7% de mujeres de Barcelona se dedican única y exclusivamente al trabajo del hogar no remunerado.
Por otro lado, las tareas de cuidados a nivel profesional también las desarrollan en su mayoría mujeres, más del 90% en muchos casos, y, en concreto, por mujeres de origen extranjero. Por lo que no es solo un sector profesional muy feminizado, sino que también se tiene que tener en cuenta las diferencias de nacionalidad. En octubre de 2021, de las personas registradas como trabajadoras del hogar, el 52,2% tenían la nacionalidad extranjera. Se trata de un sector feminizado y precario en el que, como dice el informe, muchas veces el salario no supera los 10€ la hora.
Las víctimas de los abusos
El informe recoge las distintas formas de agresiones machistas que se dan en la ciudad, desde la violencia vicaria, hasta las agresiones sexuales y los feminicidios.
Cabe destacar que la mitad de las adolescentes de entre 17 y 18 años han reconocido ser víctimas de abusos sexuales de distintos tipos (acoso, abuso, exhibición o agresión) en comparación con el 5,9% de sus compañeros.
A su vez, el Hospital Clínic de Barcelona, el centro de referencia para las víctimas de abuso sexual en Barcelona, registró en 2022, 659 agresiones sexuales, un 41% más que el año anterior. De todas las víctimas, el 90% fueron mujeres y todas las agresiones fueron cometidas por hombres.
Por último, el 23,9% de las mujeres consideran que pertenecen a un colectivo discriminado. Del total, un 63% dice que es debido a su género, seguido de su orientación sexual y etnia. En el caso de los hombres, el 20% también considera que pertenecen a un grupo discriminado, pero por razones distintas. La mayoría de ellos es debido a su orientación sexual, seguido por su etnia y por la situación laboral y económica en la que se encuentran.