
Coca-cola no fue siempre el imperio que conocemos. Su origen mítico como un sencillo tónico en una farmacia demuestra que el mundo de las marcas es inescrutable, y por eso, quién sabe lo que puede pasar con el Plim de Reus, la coca-cola catalana que nació hace más de un siglo en Catalunya y que ahora renace dispuesta a todo.
Fue en 1929 cuando Plim, un refresco dulce de frutas, se convertía en una de las bebidas más icónicas de Reus. Su historia, sin embargo, parecía haber quedado atrás cuando dejó de producirse hace ya una década. Pero ahora está de vuelta.
A qué sabe la coca-cola catalana
El Plim de Reis resucita de la mano de dos emprendedores locales que, con el beneplácito del propietario original de la marca, Matias Olesti, han decidido devolverle la vida al mítico brebaje. La bebida tiene una historia larga. Se produjo desde 1929 hasta 2014, siempre como bebida popular en Reus y alrededores. De hecho, el Plim forma parte del cóctel propio de las fiestas de Reus, el «masclet», que mezla Plim y Vermut de Reus a partes iguales.
Por desavenencias legales, el refresco no se producía desde el 2014, pero ahora Gerard y Óscar han decidido relanzarlo junto con Matías Olasti, el dueño de la bebida. Para hacerlo, han retocado la fórmula eliminando el azúcar y han redibujado el aspecto de la marca para modernizarla.
Nada más, el resto de ingredientes de esta bebida, 100% catalana, está igual: zumo de limón (ahora ecológico), gas, agua del Pirineo y aromas de media docena de frutas distintas.
De momento ha lanzado 30.000 unidades que se distribuyen por Reus y online, a la espera de que llegue a Barcelona.
En Reus ya se pueden ver escaparates anunciando el regreso del Plim, por lo que, si quieres probar a qué sabe la coca-cola catalana nacida hace más de 100 años, ya sabes dónde buscar.