Esa cosa verde, dulce, que consume todo el mundo y que viene de Japón tiene nombre. Se llama té matcha, es té verde molido, lo está petando entre los foodies y se puede usar para más cosas que para una infusión.
Se ha venido a usar sobre todo en repostería, dado su increíble sabor y su condición de producto fácilmente maleable. Además, de él se habla casi casi en términos de Bálsamo de Fierabrás (y no es para menos, el kilo a un buen precio puede salirte por 250€).
Hay quien asegura haber abandonado el café porque el efecto de la teína del matcha es dos veces más potente que el de la cafeína. También se dice que reduce el estrés, el colesterol, las inflamaciones, que ayuda a perder peso porque aumenta el metabolismo. No faltan quienes dicen que es útil incluso para reducir la ansiedad.
Lo cierto es que la mayor certeza científica de sus propiedades es su riqueza en antioxidantes. Aclaro que esta frase no pone en duda todos los beneficios arriba mencionados: cuando el río suena agua lleva y el objetivo de este artículo no es el de arremeter contra el matcha.
Sino todo lo contrario. El descubrimiento del matcha fue un auténtico match (ja ja ja) y, como si de una gymkana se tratara, nos hemos pasado meses deambulando, vagando por las calles de Barcelona para saber todo lo que se puede hacer con este oro verde. Creemos que lo tenemos y, como vivimos para contarlo, aquí te dejamos la lista y las opciones de nuestra ruta del matcha.
1 Para hacérTElo en casa
Lo primero es lo primero, que diría Perogrullo. ¿Dónde comprar este polvo verde? Pues en la casa del matcha. En serio, se llama así (The Matcha House) y es un auténtico herbolario ubicado en el hervidero de la modernidad barcelonesa: en el Barrio de Gracia.
¿Dónde? Passatge de Frigola, 3.
2 El té en sí
Es casi un pecado escribir sobre Usagui para hablar exclusivamente del matcha: qué postres, por el amor de Dios. Así que teníamos que mencionarlos, por lo menos. Usagui es una tetería japonesa, lugar de parada obligatoria en la ruta por Barcelona en búsqueda del matcha.
¿Dónde? Carrer Santjoanistes, 28.
Nombre: Usagui
3 Magia con el matcha
Aquí tres cuartos de lo mismo que con Usagui. Mr Kakigori es el antilugar para los diabéticos, el paraíso de quienes se pasan la comida esperando el postre. El kakigori es un helado hecho a base de hielo raspado y sirope. Kakigori de matcha es ambrosía y con el dorayaki se te puede caer una lagrimita.
¿Dónde? Plaça de la Vila de Gràcia, 3.
Nombre: Mr Kakigori
4 D O N U T S
Matcha con chocolate blanco. Juro que me ha costado terminar de escribir la frase sin salivar. Qué escándalo de dulces. En pleno Raval hay un rincón llamado La Donutería que de harina, leche, huevo, mantequilla, levadura, agua, azúcar, sal y algún ingrediente más, hacen arte.
¿Dónde? Carrer del Parlament, 20.
Nombre: La Donutería
5 Francia+Japón
Aquí aquel cliché de “se nos acaban los adjetivos” es completamente verídico. No hay definición posible para el croissant de matcha de Takashi Ochiai. Hay que ir, probarlo y que te dé absolutamente igual no haber plantado un árbol, ni escrito un libro, ni tenido un hijo. De verdad, esta pastelería japonesa enamora.
¿Dónde? Carrer Comte d’Urgell, 110.
Nombre: Takashi Ochia