Adéntrate en esta joya del modernismo con esta visita libre.
La Casa Vicens es uno de los templos del modernismo catalán, posiblemente uno de los edificios más llamativos que hayas visto nunca. Cada detalle en este edificio fue pensado y encaminado a generar una sensación concreta en quien habitara esta increíble residencia. Hoy esa misma sensación la experimentan los cientos de personas que la visitan y quizá la mejor forma de disfrutarla sea con esta visita libre.
Lo hipnótico de Casa Vicens es la capacidad del edificio para conseguir abstraerte de las calles de una ciudad como Barcelona y sumergirte en un mundo fantástico donde priman los motivos naturales y los colores refulgentes. Casa Vicens se edificó entre 1883 y 1885 como casa de veraneo para el corredor de cambio y bolsa Manel Vicens y Dolors Giralt, su mujer, en el barrio de Gràcia, lo que da una idea de la sensación de oasis que este edificio ofrece al visitante frente a las inclemencias del tiempo.
La mejor forma de descubrir este tipo de obras de arte gigantes que sobreviven al tiempo es perderte por sus salas y pasillos, acompañado únicamente por tu audioguía, que está incluida en el precio de la visita. Además, si compras tu entrada a través de este enlace podrás disfrutar de un 50% de descuento los viernes y un 25% de descuento el resto de días de la semana.
Pero eso no es todo. Comprando la entrada con Fever tienes un beneficio extra: una lata de craquiñolis que llevan la firma de Hofmann (¡nada menos!), un restaurante con estrella Michelin, una de las escuelas de cocina más prestigiosas del mundo y los responsables de los mejores dulces de Barcelona.
Con apenas 30 años, Antonio Gaudí firmaba una de las obras más relevantes de toda su carrera. Casa Vicens, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sirvió como hoja de ruta del modernismo que vendría y hoy es punto de partida obligado para locales y turistas.
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