Yo no soy ni mucho menos de las personas más calurosas que conozco. Eso sí, puede que me esté volviendo, definitivamente, la más quejica. Pero yo sé que no soy la única que lleva la cuenta perdida de cuántos días lleva ya rezándole a la virgen de la cueva para que termine este bochorno insoportable.
Barcelona. Te imagino metidita en esa curva que va desde ti y hasta Italia, junto a quién recoges esta sopa de calor mediterráneo que se evapora y se evapora pero no termina de explotar. Menos mal que anuncian lluvias para mañana y que ayer a la noche ya empezó a moverse una brisa que entraba a través de las ventanas y llegaba a nosotros como agua a una boca sedienta.
Las lluvias, que ya acechan toda la península, comenzarán a notarse en las primeras horas de mañana en el norte e irán desplazándose de oeste a este a lo largo del día. Eso era lo que queríamos escuchar. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), anuncia, de hecho, que en Barcelona podrían comenzar a partir de esta tarde, pudiendo llegar hasta el martes de la semana que viene. Unos días de confinamiento no forzado y bien fresquitos.
El Servei Meteorològic de Cataluña (Meteocat) ha anunciado que el calor que hemos estado pasando, de repente, las últimas noches, se transformará al fin en lluvias intensas a partir de mañana. Con el agua, descenderá también la temperatura que oscilará entre los 20 y los 24ªC.