En Entredogs (Carrer d’Alfons XII, 94) tienen hasta cerveza para perros.
Aún faltan años de evolución para que un perro –por cuenta propia y decisión individual– se decida a bajarse al bar a hacerse una cerveza. Es más: es muy probable que ese momento no lo lleguemos a ver. Por suerte, hasta entonces, está Entredogs, adonde tu perro no irá motu proprio, pero será bien recibido si te decides a entrar con él.
Y es que Entredogs es uno de los negocios más pintorescos de Barcelona. Podría compararse con Barkcelona, un club social para perros del que te hablamos en este artículo, pero Entredogs tiene alguna diferencia.
Por ejemplo, durante tu estancia es obligatorio que tengas atado al perro. Una restricción completamente lógica: cualquiera se imagina el guirigay que supondría 12 perros sueltos en 40 metros cuadrados. Lo bueno, eso sí, es que debajo de la argolla en la que tienes atado a tu mascota, hay una cama para perros.
Entredogs, que está en el barrio de Sarrià-Sant Gervasi, no solo está hecho para el perro. Tiene una carta con productos de temporada y proximidad para ti. Y para él, snacks y dulces 100% naturales. Pero más allá del tema de la comida, en Entredogs también organizan actividades como talleres, charlas o eventos.
Un matiz, que luego todo se sabe: los perros no se pueden subir a las sillas, que para algo tienen su cama.
Foto de portada: @donnutbirra