Es sabido que el Cruïlla es uno de los festivales más importantes de Barcelona junto al Primavera Sound y el Sónar. Nos tiene acostumbrados a un formato más pequeño pero con propuestas que consiguen reunir algunos de los mejores artistas de la escena local e internacional. Este año, esa apuesta se ha visto fuertemente recompensada con el éxito que ha tenido el festival. Ha reunido a unas 72.000 personas y nos ha hecho bailar y disfrutar en una edición marcada por la sostenibilidad, el civismo y la buena gastronomía.
El viernes
Ya en la primera jornada empezaron a despuntar algunos nombres del cartel, como Trueno y Toteking. Sin embargo, el plato fuerte del festival llegó el viernes y el sábado. El viernes, con el éxito implacable de Meute y Rigoberta Bandini, así como con los clásicos temas de Duran Duran. Los primeros, con su habitual techno, nos hicieron mover el esqueleto y viajar por su repertorio musical.
De Bandini qué vamos a decir: es un clásico local al que nos encanta volver a ver siempre. Además, desde que anunció que se retirará durante un largo tiempo de los escenarios el próximo mes de octubre, las ganas de verla en directo se han vuelto inevitablemente mayores. Para sorpresa de los presentes, se subió al escenario Amaia para cantar junto a la banda la canción que han compuesto juntos: Así bailaba. Un tema que se estrenaba la noche antes de su actuación en el Cruïlla.
También Duran Duran logró calar entre los asistentes al festival con un inevitable tono nostálgico al sonar sus temas más emblemáticos de los 80’s y 90’s, como Ordinary world o Come undone. Un mito generacional al que siempre nos gusta recordar.
El sábado
El sábado volvió a ser un éxito, y de hecho fue el día que más gente hubo. Juan Luis Guerra era un gran reclamo, así como lo era Rubén Blades. Ambos nos hicieron bailar sin parar con sus ritmos de bachata pegadiza. El escenario principal estaba completamente lleno de público en ambos conciertos.
En definitiva, esta duodécima edición del festival Cruïlla ha sido un ejemplo de que Barcelona es un referente en cuanto a festivales de música y que un proyecto que empezó siendo pequeño y muy local ha sabido crecer y abrazar lo internacional sin perder su esencia.