
Será un espacio orientado a la protección de animales.
Tras 127 años de historia, el modelo bajo el cual está concebido el Zoo de Barcelona cambiará radicalmente. Y es que el Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado el plan estratégico del parque y la iniciativa ciudadana ZooXXI.
Para la puesta en marcha de las distintas iniciativas, será necesaria la inversión de una cifra cercana a los 64 millones de euros entre 2019 y 2031. Será con el fin de crear un complejo abierto y pionero. Pionero, claro, porque el zoo de Barcelona pasará a ser el primer parque animalista de Europa.
Para llegar a serlo son necesarias muchas modificaciones. A saber, en el Zoo actual hay más de dos mil animales de 300 especies distintas. E igual que Roma no se tomó en un día, los mecanismos de adaptación también serán progresivos. La estrategia concreta está aún por definir, pero por ahora se sabe que los animales serán trasladados a santuarios o cuidados hasta su muerte.
También se sabe que la intención es convertir el actual zoo en un punto de encuentro de la investigación y conservación de la fauna autóctona, ibérica y mediterránea. Por eso, solo se estimulará la reproducción y el apareamiento de especies en programas de reintroducción. En este caso y a priori serían las siguientes: sapillo balear, alcaudón chico, tortuga mediterránea, triton del Montseny, gacela dorca, espátula, garcilla común, autillo, galapogo leproso, y los buitres negro y leonado.
La iniciativa la aprobó el viernes el Ayuntamiento y contó con el apoyo de BComú, PdeCAT y ERC, mientras que Ciudadanos, PSC y PP votaron en contra.