Sí, a todo el mundo le encanta Barcelona y no podemos evitar regodearnos con ello, pero la ciudad tiene un lado oscuro que nos cuesta reconocer. Si te tiraste de los pelos cuando salió el videoclip de Living Barcelona, esto te interesará.
1. El metro da un poco de asco, no por falta de limpieza, sino por las enormes cucarachas y ratas que te puedes encontrar.
2. Tus amigos de fuera de Barcelona solo hablan contigo de política y, sinceramente, empiezas a hartarte del temita.
3. También aseguran que por el simple hecho de vivir aquí, perteneces a la Cofradía del Puño Cerrado.
4. Porque no es tacañería, es que vives en una ciudad muy europea y salir por ahí es caro… Muy caro.
5. Los balcones están repletos de esteladas pero las tiendas de souvenirs de sevillanas, toros y castañuelas. Te parece una contradicción.
6. Aquí la tranquilidad brilla por su ausencia, hay aglomeraciones en todas partes.
7…Por no hablar del ruido ¿Es que las obras no van a terminar nunca? Vivir en Barcelona puede provocar sordera.
8. Por vivir en Barcelona no tienes que ser necesariamente del Barça.
9. El postureo: la “hipsteria” se nos ha ido de las manos.
10. La Barceloneta un sábado por la mañana en pleno julio… La playa no es un vertedero, cuyons.
11. Salir con la constante sensación de que vayas donde vayas, te van a estafar con lo que consumas.
12…Por no hablar de ese ansia de tener la cartera controlada en todo momento.
13. No solo de Gaudí vive la ciudad condal, parece que cuesta de pillar.
14. Aunque el semáforo esté en verde para los peatones, los coches se los saltan a la torera. Cruzar debería considerarse un deporte de riesgo aquí.