Catalunya amanecía este lunes con el levantamiento de un confinamiento comarcal que ha durado más de lo esperado. Y apenas unas horas después, desde la Generalitat ya anunciaban su voluntad de flexibilizar aún más las restricciones, en concreto permitiendo a los bares y restaurantes abrir hasta para ofrecer cenas y alargar el toque de queda hasta las 23:00 h.
Así lo dejaba caer la consellera de la Presidencia en funciones, Meritxell Budó, asegurando que el Govern estudia flexibilizar las medidas en esta línea. «Ya va siendo el momento de dar este aire que tenemos que dar a la gente y a los negocios. Esta mañana leía la incidencia e impacto psicológico que está teniendo sobre nuestra población esta pandemia, que ya hace un año que dura», dijo la consellera en Ràdio 4.
La mejora en los datos sanitarios hace que el objetivo del Ejecutivo catalán sea levantar medidas progresivamente e incluso estudiar como próximo objetivo el levantamiento del confinamiento autonómico, aunque Budó afirmó sin embargo estar «100% segura de que el ocio nocturno no abrirá de aquí a 15 días».
Por su parte, desde el Gremio de Restauración de Barcelona se cree que este paso hacia adelante en la flexibilización de las medidas debería acometerse esta semana para permitir a los negocios planificar la Semana Santa. Roger Pallarols, representante del gremio, asegura que «Barcelona vive un auge de los botellones muy preocupante» y que «no tiene sentido mantener las restricciones cuando no se es capaz hacerlas cumplir».
Foto de portada: Joan Valls / NurPhoto / AFP