Tú. Sí, tú, que acabas de despertarte por el ruido de tu madre pasando el aspirador para que espabiles o porque tu compañero de piso parece no saber bajar el volumen de la música. Estoy ahí, soy tu compañera de cama. No querías que esto pasara pero la situación se te fue de las manos. Un chupito por aquí, un copazo por allá…Todas las noches en las que repites como un loro “esta y a casa”, terminas conmigo. Por mucho que trates de ignorarme, voy a estar ahí un buen rato y cuanto más viejoven seas, mejor.
Sí, soy yo: la resaca. Y esta vez tampoco te has librado de mí.
Ah, que ser más iluso eres pensando que podrás curar la resaca con una pastilla. Sí, puede que te ayude dentro de un rato pero ahora tienes que soportarme. Hoy me has pillado de buenas y te voy a decir los mejores lugares de Barcelona para evitarme ¿Qué te parece?
Pasea por la playa
Lo sé, es invierno pero eso ¿y el tiempazo que está haciendo? Con esto del calentamiento global hace la temperatura suficiente como para que puedas tumbarte en la arena (envuelto en abrigos o mantas, eso sí), cerrar los ojos y sustituir mis estragos en tu cabeza por el sonido de las olas del mar.
…O por un parque
Curar la resaca yendo a un parque es, junto con la de ir a la playa, la mejor opción para volver a ser persona. Si el de la Ciutadella lo tienes muy visto (aunque la Cascada hipnotiza por mucho que la conozcas), puedes perderte por el de Joan Bossa o el de Turó de la Peira, de los parques más bonitos de Barcelona. Es probable que te cruces con otros seres con cara de zombie tirados en la hierba o manteniendo la poca dignidad que les queda en un banco. No les evites, son de los tuyos.
Come
Mucho y con muchas calorías. Es lo mejor que puedes hacer para digerir la enorme ingesta de garrafón que te has metido entre pecho y espalda. Como ya has desayunado churros a eso de las seis de la mañana, te recomendamos los mejores brunch de Barcelona.
Carrer Petritxol
El chocolate elimina todos los males, las cosas como son. El día que las reservas de cacao se agoten será el fin de la humanidad. Hace poco se descubrió que una molécula del chocolate negro ayuda a curar la resaca, así que pasaos por esta calle y disfrutad de vuestro remedio con chocolates, churros y un olor delicioso.
Apaga la luz
Puede ser la de tu habitación o ¿por qué no pruebas a comer en un restaurante a oscuras? Dans Le Noir va de eso, de no ver lo que narices tengas en el plato ¿Te atreves a probarlo?
Si nada de esto te convence, recomendamos los clásicos: mucha agua, horas de sueño, un bañito caliente y, a las malas, pastillazo como tu brazo.