
El Born es mucho más que esa zona hipster con un montón de locales de comida ecológica, cafeterías vintage, tiendecitas cuquis e iniciativas coolturetas. Es un barrio con edificios históricos y calles estrechas en el que es fácil echar el día y que sepa a productivo. Os contamos qué podéis hacer por el área más medieval de Barcelona.
1. Iglesia de Sant Pere
Su construcción se remonta al 945 D.C, por lo que ha sido testigo ciego de todos los hechos históricos sucedidos en Barcelona. Hoy, atravesar su restaurada puerta es un viaje en el tiempo que merece la pena hacer.
2. Plaça de Sant Pere
Después de visitar la iglesia ¿Qué mejor plan que tomarse una Estrella Damm en una de sus terrazas? Ahora la ves muy tranquilita pero en su momento fue escenario de intrigas, conspiraciones y secretos, como explica esta ruta por la Barcelona medieval que te proponemos.
3. Palau de la Música catalana
Impresionante por fuera y sobre todo por dentro, esta obra arquitectónica de principios del siglo XX es uno de los edificios cumbre del modernismo catalán. Su construcción fue financiada por melómanos, industriales y financieros catalanes y en 1997, fue declarado Patrimonio de la Humanidad. Es templo de las corcheas y el color es un referente en la vida cultural de Barcelona que si aún desconoces, no sabemos a qué estás esperando para que te de el síndrome dé el Síndrome de Stendhal.
4. Mercat Santa Caterina
Es uno de los mercats más recientes de la ciudad condal y por tanto, al que huyen los barceloneses cuando ven que no caben en La Boquería. Toma el nombre de una mujer que durante la posguerra, se dedicó a repartir comida entre los barrios de la ciudad condal. Hoy, es zona de paso de foodies y chefs.
5. Santa María del Mar
También conocida como La Catedral del mar gracias al libro de Ildefonso Falcones. Aunque el hecho indigne, merece la pena pagar el precio de entrada para admirar el iluminado interior de la basílica. En su construcción participaron los habitantes del barrio de la Riviera, que invirtieron 54 años en terminarla (Todo un récord teniendo en cuenta que la Catedral de Barcelona tardó 400 años).
6. Museu Picasso
Alberga 4.251 obras importantísimas para descubrir la etapa de formación del artista y por qué Pablo Picasso es uno de los pintores más reconocidos de nuestra historia. Una curiosidad. La colección iba a estar expuesta en un museo de Málaga pero las autoridades de la ciudad rechazaron la iniciativa, pues significaría estar de parte de un artista con una larga lista de diferencias políticas con el franquismo. Fue por eso que su amigo y secretario Jaime Sabartés tuvo la idea de proponer al ayuntamiento de Barcelona crear un museo para albergar la obra. Hoy, es punto de encuentro de artistas, coolturetas, bohemios y guiris.
7. Un dicho:roda el món i torna al Born: es una expresión del espíritu emprendedor y aventurero de los barceloneses. El Born era (y es) punto de encuentro de comerciantes y nuevos negocios, por lo que todo aquel que viajaba a tierras desconocidas terminaba volviendo para negociar.