Es algo habitual: bañarse en alguna de las playas de Barcelona y compartir agua con alguno de estos pequeños animales. Casi siempre hay medusas, pero esta vez su presencia roza lo preocupante. Y es que no hay que olvidar que pueden suponer un problema, especialmente para los más pequeños.
Por eso, desde la web de Baños y playas del Ayuntamiento de Barcelona alertan de una gran presencia durante la jornada de ayer. Recomiendan no sumergirse demasiado e ir con precaución para evitar acercarse a ellas.
Concretamente, se trata de dos especies distintas: la pelagia y la rhizostoma pulmo. Ambas, frecuentes en la costa Mediterránea. Sus picadas provocan muchas molestias y una sensación de quemadura, pero al menos no son ni peligrosas ni muy grandes.
Aun así, estos seres marinos causan un cierto revuelo: la semana pasada se tuvo que asistir a más de 300 personas por picadas de medusas.