Ante la enorme subida en el número de contagios, al Ayuntamiento de Barcelona no le está quedando más remedio que actuar lo más rápido posible. Esto sumado a la consecuencia de quejas por parte de los vecinos, que van aumentando en desesperación, sobre todo en el Barrio de la Barceloneta. Así pues, este ayer el Ayuntamiento volvió a pronunciarse y, esta vez, ha puesto sobre la mesa una propuesta tan creativa como drástica: mojar playas y plazas para evitar su ocupación masiva durante los botellones.
La medida empezará a aplicarse este fin de semana y, para llevarla a cabo, se ha hecho un llamamiento tanto al dispositivo policial como al de limpieza y de agentes cívicos que estarán trabajando juntos durante la noche con un mismo objetivo: evitar las aglomeraciones en determinadas zonas de la ciudad. No sólo se intervendrá en Barceloneta, sino también en Gràcia, Ciutat Vella o en incluso algunos puntos de Sants, Sarrià-Sant Gervasi o Nou Barris.
El cierre del ocio nocturno y el descarte de cerrar las playas por la noche ha llevado a la decisión de probar a base de manguerazos. En lo que los expertos señalan como un último esfuerzo a la ciudadanía, la recomendación es cuidarse y esperar atentas a las próximas noticias, por si esta solución no funcionara.