No lo decimos nosotros, aunque motivos y experiencia tendríamos de sobras para ello. Lo dice un estudio de una web tan consolidada y autorizada al respecto como Idealista. Y no, tampoco creemos que sorprenda a nadie a estas alturas de la película, ¿verdad?
Ya no es que seamos por media la ciudad con las habitaciones más caras de España, sino que incluso somos la única que sobrepasa el umbral de los 400 euros por mes. De hecho, la media para pillar una habitación en Barcelona es de 426 euros al mes. Casi nada, vamos. Teniendo en cuenta los salarios que se manejan por lo bajo en el mercado laboral, hablamos de unos precios con los que llegar a fin de mes puede convertirse en una verdadera utopía para muchos.
Por si fuera poco, si lo comparamos con el año pasado la cosa es más depresiva aún. El incremento en la media ha sido de hasta 58 euros con respecto al curso anterior, en el que el alquiler medio de la habitación se situaba en torno a los 368 euros. Unos precios que se van por las nubes cuando en general lo que se ofrece son camas individuales de 90 centímetros y además los gastos no están incluidos.
Pero luego miramos la demanda y se entiende todo. Si el año pasado eran 33 millones las búsquedas las que se hicieron en el portal web, en este llegan casi a los 60 millones (58,9). Un 78,1% más… ¡En un año!
En cuanto al perfil del inquilino, cada vez es menos habitual como media ese estudiante clásico de carrera. La cosa va variando: personas con trabajo y sueldo insuficiente para alquilar por su cuenta, parejas, turistas… En definitiva, de todo un poco con una edad media que va creciendo y ya se sitúa en los 30 años.