El Ayuntamiento de Barcelona quiere que esta Navidad la ciudad brille más y mejor que nunca, porque entiende que el alumbrado navideño es un gran atractivo que, de forma indireca, estimula el comercio local. A pesar de que aún faltan más de dos meses ya han comenzado a instalarse unas luces que contarán con algunas novedades en lo cuantitativo y lo cualitativo.
Ya se anunció en mayo el ambicioso proyecto que el Consistorio se traía entre manos. Con una inversión presupuestaria que ha crecido en un 24 por ciento, pasando de los 1.662.000 euros a 2.057.866 euros, se «permitirá aumentar el número de calles iluminadas en el centro, mejorar la calidad del alumbrado y reforzarlo en las calles de las zonas del Plan de barrios y a las zonas donde se realizan obras de larga duración», señalan desde el gobierno municipal.
La iluminación estará sufragada en un 75 por ciento por el Ayuntamiento y habrá novedades. Plaza de Catalunya, Gran Via de les Corts Catalanes y el Carrer de Aragó estrenarán luces que llevarán la firma del Estudi Antoni Arola, que se proclamó ganador del concurso convocado el pasado febrero.
«La iluminación navideña de este año tendrá más novedades, como el hecho de que, por primera vez, la ronda Sant de Pere, entre el paseo de Sant Joan y la plaza de Urquinaona, se engalanará con luces de Navidad y se sumará así a otras vías que se han iluminado por primera vez en los últimos años, como la Vía Laietana, la plaza de Urquinaona o la calle de Balmes, que amplían o consolidan el alumbrado», explican.
Fotos: Ayuntamiento de Barcelona