Y lo hace como parte de un programa enfocado al acto de compartir información.
Sí, sabemos que no está dirigido a barceloneses. Que no es el Mercado de Lesseps, ni el de Sant Antoni, ni el de la Llibertat. Pero no por ello hay que negarle mérito: el Mercado de la Boquería, con todos los peros que se le quieran poner, es un lugar ideal para la socialización y la ampliación de conocimientos gastronómicos.
Abarrotado de turistas, sí, pero existe desde 1840: su estado actual es consecuencia del curso natural de los acontecimientos.
Yendo al tema del titular, diremos que forma parte de un proyecto impulsado por el Borough Market de Londres: se pretende o se aspira a que siete mercados del mundo establezcan diálogos. Siete de los mejores mercados del mundo tengan conversaciones activas con el fin de mejorar en materias de sostenibilidad, de promoción de calidad, de medioambiente. Para, en suma, ser más sostenibles.
El de la Boquería es el único de toda España que integra la liga de los 7 magníficos. El resto son de Londres, Berlín, Budapest, Melbourne, Sydney y Seattle. Circunstancia de la que se puede deducir que el de la Boquería actúa, también, como referente o representante del mercado (nunca mejor dicho) español.