
Barcelona dice adiós a las temperaturas casi primaverales que han marcado la última semana de enero, con registros que alcanzaron los 20 grados y dejaron unos cielos de domingo perfectos para pasear por la playa.
Será gracias a la borrasca Herminia, que ya ha afectado al norte de la Península Ibérica con frío y lluvia y que ahora se dirige hacia la capital catalana con un un notable descenso de las temperaturas.
Primeros cambios a partir del lunes, frío intenso desde el miércoles
Tal y como señala el Meteocat, los primeros efectos de la borrasca ya se han notado este lunes, con un descenso de las temperaturas que contrasta con las altas temperaturas del domingo.
Pero estos cambios se recrudecerán a partir del martes y el miércoles, cuando la borrasca Herminia se instale completamente en la ciudad. En este momento las temperaturas mínimas descenderán hasta los 7ºC. Este descenso se intensificará a medida que avance la semana, llegando a mínimas de 5ºC el viernes.
Aunque no se esperan grandes precipitaciones para esta semana, no se descarta alguna lluvia ligera y puntual en el litoral barcelonés.
Más allá del viernes las previsiones son más dudosas, por lo que se recomienda a los ciudadanos revisar las actualizaciones del Meteocat para obtener información más precisa sobre la evolución de la borrasca y, eso seguro, salir abrigados durante toda la semana.