El final de la guerra contra la covid-19 parece verse cada vez más cerca. Ya «hay luz al final del túnel», ha expresado Josep Maria Argimon, secretari de Salut Pública de la Generalitat, en una entrevista en RAC1. Argimon prevé que el Govern cuente hacia finales de enero con 350.000 dosis que empezar a administrar.
Esta vacuna, que seguramente sería la diseñada por la farmacéutica estadounidense Pfizer, inmunizaría a 175.000 personas dado que necesita de dos dosis para ser efectiva. A finales de enero se administraría la primera dosis y a finales de febrero, alrededor de 28 días después, la segunda toma. La inmunidad se adquiriría quince días después de recibir la segunda dosis.
Según cálculos de la Generalitat, para Semana Santa habría en Catalunya 300.000 personas inmunizadas frente al virus gracias a la segunda entrega de vacunas que llegaría a Catalunya a finales de febrero.
Los primeros en ser vacunados será la población de riesgo, los encargados de cuidar a esta población de riesgo y el personal (tanto sanitario como no sanitario) en primera línea en la lucha con la pandemia. Además, Argimon ha puntualizado que haber pasado la enfermedad no excluirá a nadie de estar en la cola para ser vacunado, ya que no se sabe con seguridad el grado de inmunidad de aquellos que ya fueron contagiados.
Por el momento, el objetivo de la Generalitat es alcanzar el 70 por ciento de personas vacunadas, cifra que será difícil alcanzar para el verano de 2021. El próximo verano será por tanto algo más laxo que el anterior aunque no habrá una vuelta total a la normalidad a pesar de que ya se haya vacunado para entonces a toda la población de riesgo.