Dice un proverbio adolescente o una frase harto frecuente en estados de Messenger que los ojos son el espejo del alma. Nosotros vamos más allá, cogemos la misma frase y cambiamos ojos por neveras: las neveras son el espejo del alma. A fin de cuentas, un rápido vistazo a una nevera puede arrojar más datos que un análisis de sangre; llegar a ser indicativo del nivel socioeconómico de la persona que la posee; hablar, también, de los horarios laborales del dueño e incluso puede dar información sobre su catadura moral.
Eso, entre muchas otras cosas, es lo que pretende demostrar Corona Fridges, el proyecto de cuenta Instagram que, en tiempos de coronavirus, han creado Joana Choquet y Blanca Pía. Corona Fridges se define fácilmente: “es un perfil de Instagram de las fotografías de neveras mandadas por personas durante el confinamiento”, dice Joana Choquet.
Internacionalización
Tienen hasta 250 fotos de neveras.
Sobre el número de fotos que tienen reunidas hasta la fecha, Choquet cuenta hasta 250 y añade “lo que hace más gracia es que hay muchísima gente que tiene muchas cervezas y mucho vino en la nevera”.
El interior
Neveras sobreabastecidas, incluso, por alimentos perecederos que en el caso improbable de que cerrasen los supermercados podrían llegar a caducar antes de ser usados. “Ver alimentos más de slow food es lo que más me ha llamado la atención”, dice Joana Choquet.
Corona Fridges es también un análisis tangencial del impacto sociocultural de la pandemia. Blanca Pía dice que “define muy bien la sociedad en la que estamos; somos muy egoístas. Ante el miedo, reaccionamos de forma individual”. La prueba más inmediata son las estanterías de los supermercados y consecuentemente las neveras de las personas.
Futuro
Foto de portada: Fabricio Lima (Ámsterdam)