Faltan diez días para Sant Jordi pero Cupido ya está onfire y durante hoy, Día Internacional del beso, nos ha asegurado que va a hacer de las suyas.
Es un buen momento para que te dejes de rodeos y te acerques a esa persona que lleva tiempo okupando tus horas de sueño y empanamiento. Sí, sabemos que es una afirmación que podríamos haber copiado perfectamente de un artículo de la Bravo pero ¿Pasa o no pasa? Anda, no os hagáis los grinch que ya nos conocemos…
Una de las claves para que ese acercamiento sea exitoso es el lugar. Seguro que recordáis dónde, cómo y con quién os disteis el primer beso. Si te pasa como a mí, que fue en un botellón con un chaval con más acné que cerebro, tienes la oportunidad de llevarte un buen recuerdo si lo haces en estos sitios:
1. Bunkers del Carmel
El nombre oficial es mirador del turó de la Rovira pero es más conocido por los búnkers que se construyeron durante la Guerra Civil para defender a la ciudad de los bombardeos. Hoy, es el lugar perfecto para contemplar el atardecer sobre la ciudad de Barcelona desde las alturas y hacer honor al Día Internacional del beso.
2. Durante un concierto de blues en el MEAM
Un concierto siempre es una opción acertada si quieres dar ese primer beso memorable pero si encima el escenario es en el Museu Europeu d’Art Modern, es para asegurarse el triunfo.
3. Bosc de les fades
Museo de Cera, Passatge de la Banca, 7
Es uno de los lugares más mágicos de Barcelona, pues atravesar la puerta es sumergirse en un mundo encantado poblado de hadas, gnomos y duendecillos. Si tu acompañante es fan de las películas de Disney, es tu momento de atacar aprovechando el Día Internacional del Beso.
4. Carrer Aiguafreda
Con sus plantitas, flores y centenarios muros blancos, se la considera una de las calles más bonitas de Barcelona.
5. Laberint d´Horta
Si lo de Aiguafreda no ha funcionado, en la misma zona se encuentra este jardín museo en el que te sentirás como Alicia en el País de las Maravillas (y sin reinas con cierto gusto por las cabezas cortadas merodeando).
6. Font Màgica de Montjuïc
Sabemos que es una turistada y que es imposible no disfrutar de sus espectáculos de luz y sonido sin tener que darte codazos con los de al lado pero qué queréis que os diga, cada vez que el agua se tiñe de rojo con la banda sonora de El Padrino se me ponen los pelos de punta. Imposible fallar.
7. Magatzem de les Bruixes i els Bruixots
Es una de las atracciones más míticas del Tibidabo y en la que por mucho que crezcas, nunca dejarás de montarte. Tiene la curiosa manía de quedarse parada en el momento más inoportuno así que en vez de imaginarte la peor de las catástrofes, aprovecha para rematar el Día Internacional del Beso. Lo de la noria del Diario de Noa es para aficionados