Tras siete meses de puertas cerras y taquillas sin visitantes, la Sagrada Familia reabrió este sábado sus puertas, aunque lo hace con ciertas restricciones como ya ocurrió con su reapertura en julio del 2020.
La vuelta es poco ambiciosa, pero supone la vuelta al fin. Por el momento tan solo podrá visitarse los fines de semana de 9:00 a 15:00 h.
La reapertura, sin embargo, estará siempre supeditada a la evolución de las cifras que vaya dejando la pandemia, como ya ocurrió el año pasado, que abrió en julio para volver a cerrar en octubre. También se retomarán en algún punto de este año las visitas de la iniciativa Hora Barcelona, que proponía visitas gratuitas para los barceloneses con un total de 61.000 entradas que se agotaron en apenas cinco horas.
La reapertura llega poco después de que la basílica alcanzara una nueva altura máxima gracias a la colocación de una pieza de fuste mayor para la torre de María, que ganó once metros hasta alcanzar los 128 metros de altura, convirtiéndose así en el punto más alto de todo el templo.
Las entradas pueden conseguirse en la web del templo.