Échale huevos y prueba los mejores huevos fritos de Barcelona. Están tan buenos que rebañarás el plato hasta dejarlo sin dibujos ¿Estás preparado/a para una sobredosis de colesterol?
L´Eggs
Passeig de Gràcia, 116
Si ofrece una de las las mejores tortillas de patata de la ciudad condal, es evidente que sus huevos estrellados están a la altura de las expectativas. Nos quedamos con los huevos fritos de espadenyas y salchichas y los Benedict, que no os vamos a decir cómo son para que os quedéis con la duda.
Allium
Carrer del Cal, 17
Si eres celíaco/a estás de suerte, ya que si te apetecen patatas y colesterol, no tienes por qué cortarte. Si te declaras ecofriendly, no puedes perderte sus huevos ecológicos estrellados con jamón ibérico acompañados por una ración de coca…del Mossèn, malpensados.
Vermutería Lou
Carrer Escorial, 3
Puede colgarse la medalla de tener los mejores huevos estrellados de por aquí, más que nada porque en 2014 ganaron el premio a la mejor tapa organizado por el Gremi de Restauració de Barcelona. No tienen ninguna pretensión: son nuevos fritos con jamón ibérico y patatas caseras pero si están tan bien valoradas, será por algo.
Bar Funicular
La Dreta de l’Eixample
Es el bar perfecto para desconectar de la fiebre “gastro” que se está adueñando de la ciudad. Su carta y precios no pueden ser más castizos: croquetas, ensaladilla rusa, bravas, boquerones…Nuestra recomendación son los huevos fritos con foie, que están para decir “Oh la la!”.
Luki
Plaça del Sortidor, 3
Es un restaurante muy cuco ubicado en Poble Sec que vale la pena visitar por su decoración y la carta. Dicen las buenas lenguas y paladares que su plato estrella tiene de los mejores huevos fritos de Barcelona. Lo mejor es que no los sirven con patatas congeladas alargadas, sino con panaderas, que son más prácticas si quieres embadurnarlas en yema.
Alba Granados
Carrer d’Enric Granados, 34
Es un restaurante elegante ideal para una segunda o tercera cita. La cocina es un poco lenta así que más vale que tengáis tema de conversación o un hambre moderado (cuando fui no lo sabía y casi me como a mi acompañante). Los huevos los sirven crudísimos, tanto que para aprovechar la yema es más útil una cuchara que un trozo de pan.
Tapa Tapa
Passeig de Gràcia, 44
Si estás por Gràcia y no sabes dónde hacer un pica-pica, este sitio es perfecto. Es una oda a la cultura de la tapa y sus huevos fritos con jamón y patatas, por típicos que parezcan, tienen un sabor muy especial.
