Hay mil escapadas posibles en Catalunya, desde la montaña hasta la playa y en verano, lxs que se quedan por Catalunya y no toman aviones o barcos tienen otra opción: visitar los pueblos con los nombres más curiosos del país.
Desde l’Ampolla a LaPera, pasando por Ultramort, en una tierra con miles de años de historia, hay muchos pueblos de nombres improbables y orígenes inciertos que esconden, más allá de su gentilicio, paisajes estupendos.
La Pera
Los habitantes de este pequeño pueblecito de Girona pueden sentirse muy orgullosos de su nombre. Se nos ocurren pocas cosas mejores que decir «mi pueblo es la pera» y encima que nadie te pueda decir que no llevas razón. Además el pueblo no es nada feo, por lo que incluso puede que incluso no sea hasta metafórico.
El nombre «La Pera» proviene del latín petra, que significa «piedra». En catalán antiguo, petra se transformó en «pera», refiriéndose a una roca o piedra, lo cual es un indicativo de la geografía del lugar.
Ultramort
También en Girona, tiene solo 210 habitantes y podemos confirmar que sí, todos ellos están vivos (al menos por fuera). No tengas miedo de pasar por el coche porque no serás atacado por una horda de zombies. Como mucho te puedes llevar un selfie con un letrero que no ves en muchas partes.
El origen del nombre Ultramort es incierto. Históricamente, aparece mencionado en 1062 como Vulturis mortuii y en 1123 como Vulture mortuo. La etimología exacta no está clara, pero estas denominaciones sugieren una posible referencia a «buitres muertos» o «más allá de la muerte», aunque esto no está confirmado.
L’Ampolla
Este pueblo marítimo del Baix Ebre de Tarragona es cualquier cosa menos lo que indica su nombre. Mar, brisa, playa….
El nombre de viene dado por la forma de ánfora que tenía la antigua desembocadura del río Ebro, que se asemejaba a una botella (ampolla en catalán). Esta forma geográfica dio nombre al pueblo, que se encuentra junto la costa del Delta del Ebro.
Madremanya
Este pueblo de Girona no tiene nada que ver con los maños, sino que se dice que el nombre Madremanya proviene del latín Mater Magna, que significa «madre grande». Esto podría estar relacionado con la importancia o el tamaño del lugar en tiempos antiguos. Quizás tiene que ver con sis vistas, con los edificios de piedra y las montañas nevadas al fondo, que convierten esta foto en obligatoria.
Porrera
Estás deseando saber el gentilicio de este pueblo, no lo niegues. Para tu chasco no se llaman porreros, sino porrerans. Y es que el nombre del pueblo no proviene de mamporreros ni nada por el estilo, sino de los puerros: Porrera deriva del latín Vallem Porreram, que significa «valle con abundancia de puerros» (ajos porros). Esta etimología sugiere que el área era conocida por la abundancia de esta planta.
Espolla
Foto: aspresemporda.cat
Leído en castellano da para chiste infantil, y la solución para evitar el chiste no parece fácil. El origen del nombre Espolla no está claramente documentado, pero el área ha estado habitada desde tiempos prehistóricos y ha sido un punto estratégico de comunicación entre el Empordà y el Rosselló. La historia del lugar está marcada por su posición geográfica y su papel en los conflictos históricos de la región.