En un esfuerzo por preservar el adoquinado de las calles más céntricas, l’Ajuntament de Barcelona ha anunciado la prohibición de arrastrar maletas y otros objetos con ruedas en el Raval y el Barri Gòtic a partir del año que viene.
Un análisis económico presentado hace dos meses en una sesión plenaria del Ajuntament revelaba que los costes que conllevan el mantenimiento continuo y la reparación del suelo en el centro llevan disparados alrededor de una década, por lo que los dirigentes de la ciudad han decidido regular el uso de aparatos y objetos con ruedas como medida de prevención y de ahorro.
La normativa, que será publicada entre enero y marzo de 2025, incluye la total prohibición del arrastre de maletas por suelo público y el uso limitado de carros de bebé, carros de la compra y dispositivos similares. Por el momento, estas limitaciones solo se aplicarán a la Ciutat Vella, pero no se descarta su extensión a otras áreas históricas de la ciudad más adelante.
Fuentes del Ajuntament han aclarado que la norma será aplicable tanto a vecinos como a turistas, «puesto que el adoquinado se desgasta igual con independencia de quien lleve la maleta». No obstante, aún se está estudiando la posibilidad de establecer pesos máximos para carros infantiles y de la compra, aunque desde el organismo se animará a «utilizar bolsas, portabebés o incluso llevar a las criaturas en brazos».
Todavía está por determinarse cómo afectará esta regulación a los usuarios de sillas de ruedas. Con respecto a esta pregunta, los portavoces del Ayuntamiento declaran que «lo mejor, por ahora, es fijarse en la fecha de publicación de esta noticia, que hay gente muy inocente por ahí que se cree cualquier cosa».