La Plaça del Cinc d’Oros es un reflejo de la historia política de España.
Como el nacimiento de un hijo no deseado que termina por convertirse en una bendición: así fue la concepción de la Plaça del Cinc d’Oros, que nació como una mera intersección entre Diagonal y Paseo de Gràcia. Y terminó por consolidarse en la plaza que, desde el simbolismo que otorga la odonimia (algo así como la etimología de las calles), mejor ha reflejado el desarrollo histórico -a nivel político- de Barcelona e incluso del país. Amén de su privilegiada ubicación en el callejero.
La plaza que, como decimos, no estaba proyectada en el Plan de Ensanche de Cerdà y que no es una plaza al uso, antes de tener un nombre oficial se conocía como el Cinc d’Oros. ¿El motivo? No puede ser más lógico: su vista cenital evocaba esta carta. Y es que estaba compuesta por cuatro rotondas o islotes en cada una de las esquinas y una más grande en el centro. Igualita que la representación gráfica del cinco de oros.
En los intentos posteriores por bautizarla siempre se imponía una causa mayor determinada por el contexto político. Se quiso erigir un monumento dedicado a Pi i Margall, presidente de la República barcelonés, pero las circunstancias (altercados de 1917, dictadura de Primo de Rivera) lo imposibilitaron.
Hubo que esperar a 1931, a que se instalase la II República, para que se hiciera realidad el homenaje. Se levantó en la rotonda central una estatua de Josep Viladomat dedicada a la República. Una estatua acompañada de un medallón obra de Joan Pié.
Acabada la guerra, los franquistas no consintieron el simbolismo (lógico, por otro lado) y convirtieron el monumento en un homenaje a la victoria franquista. Con una nueva inscripción en la base: “A los heroicos soldados de España que liberaron de la tiranía rojo-separatista. La ciudad agradecida”.
Seis años después de la muerte de Franco se homenajeó al régimen establecido: Plaza Rey Juan Carlos. Así se ha llamado la plaza desde 1981 hasta 2016, cuando Ada Colau aprobó el cambio al nombre popular.
Se entiende, entonces, que siempre será un espacio exclusivo. Destinado al poder en aquel momento. Llamándose ahora Plaça Cinc d’Oros. Habiendo recuperado así su nombre popular. Su nombre histórico y original. ¿Se podría decir de quién es el poder en estos momentos?