La expectación que despierta un Primark es difícilmente comparable a otro fenómeno de la sociedad de mercado: cuando llegó a Madrid, se llegaron a hacer excursiones desde Ciudad Real. No para ver el Prado, no para pasear por El Retiro: para comprarse un pijama y unos vaqueros. Ahora, la penúltima expectación que se ha generado viene dada de que un fulano le ha pedido la mano a su futura esposa en el Primark de Gran Vía.
Decimos la penúltima porque la última es la apertura de este mamotreto, de este templo del consumismo en Plaza Catalunya, 23. El local hará esquina con Las Ramblas, junto al Hard Rock Café, en lo que hasta finales de los 90 fue la sede del viejo Banco Central.
La cadena irlandesa ha alquilado los 7.253 metros del local y tienen previsto abrir el Primark este próximo 6 de abril. En los rótulos publicitarios que cuelgan de la fachada del edificio puede leerse que la empresa busca nuevos empleados.
La tienda será la segunda más grande de España. La primera, la de Madrid, tiene 12.400 metros cuadrados. El Primark de Plaza Catalunya será también la tercera de Barcelona. Acompañará a la de l’Illa y a la de Diagonal Mar.