A pesar del paso hacia delante del ocio nocturno, cuyas restricciones se suavizaron el 21 de junio, muchas salas continúan cerradas y cargando con una de las formas de incertidumbre más pesadas de todas las generadas por la pandemia. Las míticas Razzmatazz y Apolo son dos de las salas de conciertos y de fiesta más importantes de toda Catalunya, las dos caras de la moneda del ocio nocturno barcelonés que parecen, al fin, volver poco a poco a la carga.
Hace un mes la sala Apolo reabría después de un año y medio de silencio. Y aunque sólo reabría para ofrecer unos cuantos conciertos a un público reducido, al menos lo hacía. Esta semana, ha dado un paso más y ha comunicado a sus fans, a través de las redes sociales, la vuelta del Club. El virus no se ha ido del todo, pero muchas cosas importantes están volviendo a la normalidad. Entre ellas y desde este jueves ya podremos contar, entre las 23 y las 3:30 h. con Nitsa, los viernes y sábados, con Milshake cada jueves y, por supuesto, con los Churros de los domingos, de vuelta a partir del día 11.
Por su parte, la sala Razzmatazz tendrá que esperar un poco más, pero ya prevé fecha de apertura. Según declaraciones del propietario, Daniel Faidella, recogidas por el diario El Español, la sala de Poblenou plantea septiembre como el horizonte de su reapertura, aunque todo seguirá dependiendo de cómo evolucionen las cifras de la pandemia, que continúan mejorando con la vacunación y el mantenimiento de las restricciones.
La situación del negocio es angustiosa, no solo para el empresario sino también para sus empleados. Alrededor de 120 trabajadores siguen todavía en ERTE y las pérdidas, calcula Faidella, ascienden a 1,5 millones de euros.
Faidella se muestra optimista con la flexibilización de las restricciones al ocio nocturno pero asegura que no es suficiente y que las condiciones deben mejorar aún más antes de que Razzmatazz pueda volver a abrir. “No podemos ofrecer conciertos con mesas y sillas. No es nuestro negocio y reduce en un 20% el aforo de las salas. Perderemos más dinero que si seguimos cerrados”, explicaba el empresario.
Lo que está claro es que Razzmatazz volverá con fuerzas. Ya tienen muchos eventos pensados, ideas en marcha, todo listo a falta de que la situación acabe por mejorar y estos malos meses sean otra vez cosa del pasado.