Desde que se instauró, la supermanzana del Poblenou ha estado cubierta de polémica. Son muchas las quejas de los vecinos y los no vecinos por las dificultades en la circulación de vehículos a motor por la zona, aunque también los hay acérrimos defensores de esta medida. La supermanzana está en fase de prueba a esperas de valorar su viabilidad para extenderla a otras partes de Barcelona como l’Eixample, Gràcia, Sant Gervasi, Horta, Sant Andreu y la Prosperitat.
La Plataforma de Afectados por la Supermanzana ha realizado una encuesta para conocer la sensación general que provoca este cambio de la circulación. Los encuestados han sido los residentes en el perímetro, los trabajadores de los negocios de la zona y los vecinos de las zonas cercana. Unas 1.739 personas han votado sumando un total de 26,7% de participación, y la respuesta ha sido contundente. Un 87,2% de los encuestados se ha pronunciado en contra de la supermanzana y solo un 12,5% se ha manifestado a favor.
La iniciativa, que se puso en marcha en septiembre del año pasado, acortó los tramos de circulación para los coches en un tramo de 9 manzanas en el Poblenou y cedió protagonismo a los peatones y las bicis, usuarios del carril principal. Además, los automóviles debían reducir su velocidad a 10 km/h y en algunos casos dar importantes rodeos para llegar a su destino.
Foto: Àlex Garcia (La Vanguardia) / Fuente: El Periódico