No sabemos qué tal se come, pero los likes están asegurados.
Sí, todos lo sabemos: hay teorías que nacen desde el planteamiento crítico y dicen que la comida ya no se come, sino que se fotografía.
Realmente no es que haya teorías, es que basta levantar la vista del plato para ver qué hace la gente con sus platos de diseño. De hecho, basta con ser un poco autocrítico. Quien más quien menos ha subido a Instagram o la ha pasado por Whatsapp o, aunque sea, tiene en su galería la foto de un plato.
La comida se come, faltaría más, pero también se fotografía. No hay nada malo en ello. Es más, lo único malo que puede pasar es que la comida se enfrié y, bueno, malo será que alguien se tire más de un minuto haciendo la foto.
Llegados a este punto y en nuestro rol como periodistas, hay dos opciones (bueno, hay más): o no darle cancha a esa gente o estimular este modus vivendi. La primera no tiene sentido, porque no hace daño a nadie. Y la segunda sí que lo tiene: esto es un regalo los que se autodefinen como foodies .
Ginette
Ginette apenas lleva un año abierto y ya se ha consolidado como uno de los restaurantes de moda barceloneses. No, mejor: se ha consolidado como uno de los must en la ruta gastronómica de quienes tienen el morro fino. Y, por si fuera poco, conocemos esta pedazo de oferta que te permite comer como un marajá a un precio muy razonable.
Dónde: Carrer del Rec Comtal, 12
“Teamwork makes the dream work” – Bang Gae.
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Chicha Limoná
A modo de preludio para lo que se viene (bares y restaurantes sólo aptos para determinados bolsillos), conviene hablar de Chicha Limoná, un clásico ultra top de la ruta barcelonesa. Mención especial o aparte merece su brunch, atractivo por su precio, por lo fotografiable que es y por lo rico que está. En el link, otro ofertón para disfrutarlo al mejor precio.
Dónde: Passeig de Sant Joan, 80
Una de les noves tapes vermuteres del Chicha: el pop «salpicao» #tapes #vermut #chichalimona
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Tenim nova carta de cocktails! Els heu tastat ja? #cocktails #cocktailsbcn #chichalimona
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Enigma
Enigma concept es, como se define en su página web, la nueva propuesta gastronómica de Albert Adrià. Tan exclusivo es este restaurante y tal homenaje hace a su nombre que sólo se puede entrar en él contraseña mediante.
Dónde: Carrer de Sepúlveda, 38-40
Alkimia
Aquí hasta una foto mala, con flash y desenfoque te sale buena. De Alkimia ya hablamos en su día hace un año: recibió el premio a mejor restaurante de diseño SBID 2017. O, dicho de otro modo, a restaurante más bonito del mundo. Se entiende, entonces, que pocos sitios hay más instagrameables que este.
Dónde: Ronda de Sant Antoni, 41
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Disfrutar
Hablar de Disfrutar en términos de joyita es quedarse corto: realmente es un zafiro, oro, plata y toda piedra o metal preciosa o precioso -preciado, en cualquiera de los casos- que al lector se le quieran venir a la cabeza. Según un ranking de bastante criterio y tal y como dijimos en este artículo, es el décimo octavo mejor restaurante del mundo.
Dónde: Carrer Villarroel, 163
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