Vivir en Barcelona no solo implica saber preparar pá amb tomáquet, despedirte siempre con un adéu o saber ubicarte en función de dónde está el mar y dónde la montaña. Es más, mucho más. Si crees que no le estás sacando a la ciudad todo el jugo que contiene, probablemente te falte por tener alguna de estas experiencias ¿Las has vivido todas?
1. Hacer la ruta del modernismo y descubrir que no solo de Gaudí vive Barcelona. Cálzate unas buenas deportivas y hazte con el móvil, porque vas a ver y andar mucho para ello (sobre todo andar). No puedes vivir en Barcelona y no haber visto la Casa Estapé, el Hospital de la Santa Creu y Sant Pau, la Casa Thomas o el Palacio del Baró de Quadras.
2. Hacer o recibir una declaración de amor una noche cualquiera con la Fuente de Montjuïc haciendo su espectáculo de fondo. No sabemos cómo Hollywood no le ha hincado el diente aún a esa estampa.
3. Filosofar sobre el futuro de la ciudad contemplando el atardecer desde las alturas de los búnkers del Carmel. Es un mirador poco conocido por los turistas, así que también es el lugar idóneo para huir de las aglomeraciones (menos en fin de semana, que se llena un poco más).
4. Entrar en la Sagrada Familia y maravillarte con cómo incide la luz del sol en la vidriera iluminando la basílica. Cada hora, los colores cambian, por lo que nunca la verás igual. La entrada es cara pero si pretendes vivir en Barcelona como es debido merece la pena pagar el precio al menos una vez.
5. Ir al Sónar o al Primavera Sound… Vivir en Barcelona y no haber pisado ninguno de estos festivales podría considerarse sacrilegio en los círculos del moderneo.
6...Es más, pasarte un verano de festival en festival y de fiesta de barrio en fiesta de barrio es otra de las experiencias que no pueden faltar. Tienes que tener voz y voto cuando surja el debate de si molan más las de Gràcia o las de Sants.
7. Sacarte el carnet de bicing e ir a todas partes sobre dos rudas durante uno, dos meses…Luego empezarás con que hace mucho frío, mucho calor, mucha humedad o que las bicis están rotas y pasarás del tema pero hay que probarlo.
8. Pasar una noche de desfase y alcohol en el Apolo. Por muy antidiscotecas que seas, es algo que hay que vivir.
9. Coger el Bus Turistic de Barcelona. Sabemos que una turistada y que cada vez que paseas por las Ramblas te desesperas pero hacer el guiri dentro de tu ciudad tiene su gracia. Eso sí, no olvides llevar el palo selfie y el sombrero mexicano reglamentarios.
8. Escuchar un concierto en el Palau de la Música Catalana. No solo por su increíble acústica, sino por lo impresionante que es tanto por dentro como por fuera.