El director Elías León Siminiani se hizo un nombre con Apuntes para una película de atracos, un documental sobre la historia de un butronero de Vallecas que se hacía llamar Flako. Luego vinieron El caso Asunta: Operación Nenúfar y El caso Alcàsser, dos docuseries imprescindibles que siguen la lógica del llamado true-crime en el que Netflix ha encontrado un filón de espectadores dispuestos a dejarse embaucar por la atrocidad de una realidad que no supera a la ficción, pero que siempre va por delante dejando su estela.
Y ahora León Siminiani vuelve con un nuevo proyecto que Netflix estrena mañana: 800 metros, una serie documental sobre los atentados yihadistas de Las Ramblas y Cambrils. Un título que hace referencia a la distancia que la furgoneta conducida por Younes Abouyaaqoub recorrió por el popular paseo de la ciudad condal, atestado de gente, y en el que murieron asesinadas 13 personas y unas 100 resultaron heridas.
El director se ha servido de la ayuda de los periodistas Nacho Carretero (conocido por su popular Fariña), Anna Teixidor (autora del libro Los silencios del 17-A) y Jesús García Bueno (del diario El País) para hilar una narración que ha partido 200 horas de grabación, 150 horas del juicio grabado en vídeo y 80 entrevistas realizadas. Un material que, como por ejemplo algunas de las conversaciones telefónicas de Mohamed Hychami, ni siquiera llegó a escucharse en el juicio.
El documental cuenta con la participación de autoridades de entonces o algunas voces implicadas, todo ello buscando evitar el sensacionalismo y responder a la gran cuestión de fondo: cómo tres jóvenes nacidos aquí pudieron llegar a plantearse como válida la opción de morir matando.