Las calabazas de Halloween son hoy vecinas de las luces navideñas en Barcelona. A falta de dos meses para la celebración de estas fiestas, la ciudad ha empezado a vestirse con cortinas de bombillas y diseños de estilo invernal. Y aunque todo quede listo antes de que acabe el otoño, el encendido no se producirá hasta finales de noviembre.
Los barceloneses han visto ya las decoraciones de Navidad en la Rambla y la calle Aragón, algunos de los puntos a los que más pronto han llegado las tiras luminosas y demás adornos. En otros lugares, como en la Gran Vía, se renovará la decoración para estas próximas Navidades.
El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido apostar por la campaña de Navidad para atraer turistas españoles al centro, que tanto ha sufrido los estragos de la pandemia y el confinamiento. Por eso, este año habrá más iluminación que en las temporadas anteriores, y el Consistorio subvencionará las decoraciones de los ejes comerciales al 75% de su coste.
Y, aunque todavía estamos más pendientes de los planes de Halloween que del turrón, los villancicos y la búsqueda de regalos, sí nos ilusiona que Barcelona acoja este invierno Els llums de Sant Pau, un increíble espectáculo navideño.
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