Hoy en día, los barceloneses solo nos podemos permitir comprar una casa en nuestra ciudad si es jugando al Monopoly (bueno, siempre hay algún afortunado que sí que puede). Y si tenías la versión de Barcelona de este juego, que seguramente destrozó muchas familias, recordarás que la calle más cara era la azul oscura, Passeig de Gràcia.
Poco cambia del tablero a la realidad, ya que según el portal Tecnitasa, en 2023, Passeig de Gràcia no es solo la calle más cara de la ciudad, sino la segunda de todo el Estado, solo por detrás de la calle Serrano en Madrid.
Así que si deseas adquirir una propiedad con vistas a la Pedrera o encima de alguna tienda de lujo, a la que probablemente nunca hayas entrado pero por la que hayas pasado mil veces, tendrás que pagar el módico precio de 10.000€ por metro cuadrado.
A Madrid y Barcelona le sigue San Sebastián, que cuenta con las siguientes tres calles más caras. Se trata de la Avda Libertad, la Plaza Guipúzcoa y la calle Hernani, y comprar un piso allí cuesta alrededor de los 8.000€/m2.
En cambio, al otro lado de la moneda tendríamos la Zona de Ponent en Reus, dónde pagaríamos el precio más bajo por metro cuadrado de Cataluña y uno de los más bajos de España, unos 480€/m2. Por su parte, Tavalera de la Reina, en la Provincia de Toledo, es el sitio más barato del país dónde comprar un inmueble, allí pagaríamos 350€/m2.
Así que sentimos mucho arruinarte el sueño de tu infancia. Ahora que eres mayor, no podrás comprarte las casillas azules y, seguramente, nunca podrás.