En el hipotético caso de existir algo así como una ruta parapsicológica equivalente al Camino de Santiago, Jafra sería parada fundamental.
En el caso de existir un ránking de comunidades autónomas con más pueblos abandonados y una leyenda negra que les precede, estoy seguro de que Catalunya estaría en las primeras posiciones. Ya hemos hablado aquí de Torre Salvana o de La Mussara: dos lugares siempre en boca de los valedores del misterio a la altura de Jafra.
En Jafra, como en toda historia aterradora que se precie, hay una leyenda negra que avala su condición de lugar maldito.
La historia en sí da para desarrollar toda una novela de Stephen King, pero vamos a contarla sucintamente. Lo dicho: familia rica austriaca que se muda a una masía en Jafra tiene tres hijos con problemas de salud a quienes recluyen en casa. Padre y madre tienen una cuarta hija, madre muere en el parto, ocurren cosas extrañas, mueren los hijos uno a uno, la cuarta hija huye (de su padre, dice la leyenda) y cae a un pozo.
A partir de ahí, todo son habladurías: que si la hija se aparece en algunas curvas de la zona de Garraf, que si quien se cayó en un pozo fue el hijo (real) de una baronesa, que si se escuchan los lamentos de una niña, que si psicofonías, que si espiritismos, que si celebraciones de misas negras. Incluso que se programan concentraciones orientadas a discernir avistamientos de ovnis.
Jafra parece ser, a tenor de lo comentado en el párrafo anterior, una suerte de elemento aglutinador de todas las leyendas negras posibles. Ovnis, curva, psicofonía, misa negra. Dicen, incluso, que hace unos años profanaron el cementerio, sacaron todos los huesos y los esparcieron por todo el pueblo.
En el hipotético caso de ser cierta esta última historia, los vecinos no se quejaron. Y no se quejaron porque, como anticipa el primer párrafo, Jafra está deshabitada. Deshabitada desde los años 60. Es normal, entonces, que en esos 60 años la maleza haya cubierto un pueblo del que (y cada vez más) casi solo quedan piedras.
Sea como sea, en el hipotético caso de existir algo así como una ruta parapsicológica equivalente al Camino de Santiago, Jafra sería parada fundamental.