Que el Barça en muchas ocasiones ha jugado un fútbol que roza la categoría de arte es algo que cualquier fanático (y nosotros quizás también) te firmará encantado. Y aunque el Barça de Flick se le acerca, el hecho de que las obras jugar todavía en el Estado Olímpic de MontjUïc desluce ligeramente la experiencia. Seguro que tu también esperas volver a ver el arte en el Camp Nou, pero lo que quizás no sabías era que, cuando vuelvas, te encontrarás otro tipo de arte, más clásico, rodeándote a cada paso.
Así nos lo hs descubierto el tuitero @josepbobe, que ha hecho un hilo estupendo reseñando todas las obras de arte contemporáneas que podremos encontrar en el Camp Nou cuando acaben las obras y que convierten al campo en un auténtico museo al aire libre.
Te contamos a continuación todas las obras que podrás encontrar al aire libre en el Camp Nou.
- ÓrbiteS Centenaries (1999), de Montserrat Sastre: Escultura de plancha de hierro pintada, con dimensiones notables (207 x 310 x 95 cm), que conmemora los hitos centenarios del club.
- La barca del Barça (1987), de Xavier Corberó: Utilizando mármol, acero inoxidable y grafito, esta obra representa la «barca» del Barça, simbolizando la travesía y la resiliencia del club.
- El xut (1986), de Francesc Curulla: Una pieza dinámica que captura el momento crucial del disparo, reflejando la esencia del fútbol.
- Porta per un centenari (1998), de Pilar Urbano: Realizada en hierro y alabastro, esta obra marca el centenario del club, evocando la apertura de una nueva era.
- La Victoria (1998), de Joan Abras: Escultura monumental de resina con fibra de vidrio (370 x 234 x 197 cm), que encarna el espíritu triunfador del Barça.
- Fecunditat (1997), de Luis Rey Polo: Hecha en hormigón, esta obra de 205 x 206 x 140 cm celebra la fertilidad y el crecimiento, simbólicos del legado del Barça.
- Els socis i penyes del FC Barcelona, ànima de l’entitat (1999), de Josep Maria Subirachs: Escultura de hormigón encofrado y hierro sulfatado (458 x 139 x 48 cm), rinde homenaje a los socios y peñas como el alma del club.
- Riella (1999), de Guillem Viladot: Construida en hierro (144 x 180 x 40 cm), esta obra presenta un diseño abstracto que juega con el equilibrio y la proporción.
- Olímpica (1999), de Juan Beltran: Realizada en hierro forjado pintado, esta escultura de 205 x 100 x 100 cm, celebra el espíritu olímpico y el esfuerzo atlético.
- L’avi del Barça (1972), de Joan Viladomat: Escultura de bronce que representa al abuelo del Barça, una figura simbólica dentro del imaginario del club.
- Projecció de l’atleta mediterrani (1997), de Joan Viladomat: Hecha en acero inoxidable, esta obra de 388 x 147 x 132 cm simboliza la proyección atlética del Mediterráneo.
- Primer gest (2000), de Maïs (Marisa Jorba): Escultura en hierro y esmaltes al fuego (386 x 235 x 150 cm), que captura el primer gesto de acción, una representación de impulso y comienzo.
- Ritme II (2000), de Clemente Ochoa: Compuesta de hormigón y hierro (264 x 104 x 65 cm), refleja el ritmo y la energía en una forma abstracta.
- Diàleg entre Cultures (1999), de Elvira Fustero: Una obra de conjunto (5 piezas) en hierro que fomenta el diálogo y la interacción entre diferentes culturas.
- Sense títol. 9830 (1999), de Juan Carlos Balanza: Escultura de hierro (231 x 102 x 100 cm), un trabajo sin título que ofrece una interpretación libre y abierta al espectador.
- Segni del Tempo (1996), de Vittorio Amado: Hecha en madera y bronce, de 261 x 65 x 53 cm, explora los signos del tiempo a través de una combinación de materiales naturales y metálicos.
- Sentiment en alça (2002), de Daniel Lleixa: Realizada en chapa corten y acero inoxidable sobre un bloque de hormigón, simboliza la elevación del sentimiento barcelonista.
- Chiaro di luna (2002), de Clodoveo Masclarelli: Obra en hierro, cobre y travertino, que juega con la luz y las sombras en su composición, evocando un ambiente poético.