El veto a los pisos turísticos sigue extendiéndose por el mapa metropolitano. Después de Barcelona, ahora es L’Hospitalet de Llobregat quien ha decidido plantarse y poner fin a los alojamientos turísticos en todo su término municipal.
La medida, aprobada por el pleno esta semana, busca recuperar vivienda para los vecinos y poner freno a un fenómeno que ha tensionado barrios enteros.
Adiós a más de 500 pisos en 5 años
L’Hospitalet aplicará la regulación de la Generalitat de 2024, que permite a los municipios decidir si mantienen o no las viviendas de uso turístico. En su caso, el veredicto es claro: no habrá pisos turísticos a partir de 2028. Hasta entonces, los actuales podrán operar gracias al régimen transitorio de cinco años previsto por la norma. Después, dejarán de existir.
La modificación del Pla General Metropolità (PGM) pretende garantizar que “el suelo disponible se destine a vivienda habitual” y no a usos turísticos. Una decisión que, según el consistorio, responde a la necesidad de proteger el modelo de ciudad diversa y sostenible.
Según los últimos datos de la Generalitat, en L’Hospitalet hay 522 viviendas turísticas registradas, concentradas sobre todo en Collblanc, la Torrassa y Santa Eulàlia: zonas bien conectadas con el aeropuerto y el Camp Nou, donde el turismo se ha disparado.
Eso sí, el número real podría ser mucho mayor: siguen existiendo muchos pisos ilegales, que operan sin licencia.