Solo esa preciosa expresión con que las nombramos y que no queremos que desaparezca, ya es una maravilla: «lluvia de estrellas». A la naturaleza nos gusta nombrarla y respetarla en la medida de lo posible. Por eso, sin embargo, debemos saber que lo que llueve cuando este fenómeno se da, no son estrellas, sino meteoros: fragmentos de polvo o de hielo que se desprendieron alguna vez de sus cometas, cuando estos pasaron por la órbita de la Tierra, alrededor del Sol.
Las que vienen ahora en octubre, también son conocidas como Giacobínidas, pero nos gusta muchísimo más llamarlas Dracónidas. —¡No hay color!— El nombre hace referencia a la constelación Draco (el dragón), una constelación poco conocida por la poca luz que desprende (porque apenas se ve) a pesar de su tamaño. Es enorme.
Es de esta constelación de donde parten los meteoros a cuya lluvia se ha dado el nombre de Dracónidas. Más concretamente parten del cometa 21P/Giacobini-Zinner (por eso lo de Giacobínidas).
Cuándo y dónde ver las Dracónidas
Cada lluvia de estrellas tiene su momento de exposición a la Tierra, cuando nosotras podemos verlas. Este momento es aquél en que la Tierra, nosotros, nos encontramos atravesando los escombros o pedazos resultantes del cometa.
Las Dracónidas son una lluvia de meteoros que sucede una vez al año a lo largo de la primera semana de octubre, especialmente entre las noches del 7 al 10. Puede observarse desde el hemisferio norte y, como recomendación, el mejor momento para hacerlo es durante las primeras horas del atardecer.
Esta lluvia no es cercana a nuestro horizonte —como es el caso de otras—, sino cenital por lo que un último consejo es observarlas desde una postura horizontal, tumbados en el suelo, en una alfombra o en una tumbona.
Además, para la fecha en que las Dracónidas aparezcan este año, la luna solo tendrá dos días de edad, por lo que estará prácticamente ausente. Sin ella y sin su iluminación sobre el cielo, éste se ofrecerá como un lienzo mucho más óptimo para observar el espectáculo con claridad.
Otras Dracónidas que hicieron historia
Esta lluvia de estrellas es especialmente caótica, a diferencia de otras, como las perseidas de agosto. La de 2011 fue la más intensa de los últimos 15 años y de ella quedó un cuerpo brillante estático tan intenso sobre el cielo, que se le puso nombre: «Lebrija», ya que el punto al que fue a parar se encontraba a la altura de la localidad sevillana.
También hay constancia de que, en los años 1933 y 1946, tuvieron lugar dos fuertes tormentas meteóricas. La tormenta meteórica, es considerada como tal a partir de los 1000 meteoros por hora y la de 1933 fue de 10.000, la del 46 de 12.000.
Próximas lluvias de estrellas en 2021
Aunque las más conocidas son las Perseidas, hay varias lluvias de estrellas a lo largo de todo un año y para 2021 aún nos quedan las Oriónidas, que tendrán lugar en la segunda quincena de octubre, con momento óptimo el día 21; y las Leónidas, que alcanzarán su punto máximo en la madrugada del 17 al 18 de noviembre
No sabemos con exacta certeza que ocurrirá este año, pero por si acaso, las noches del 7 al 10, estaremos mirando al cielo.