Buena parte de los barceloneses ha cruzado alguna vez esa icónica puerta esquinera, magnífica, que con sus cortinas de aire acondicionado y sus columna robustas daban la entrada a una de las tiendas más icónicas del Portal del Ángel: su Corte Inglés.
Abierto años más tarde que la tienda que la cadena tiene en Plaza Cataluña, y a diferencia de este, el Corte Inglés de Portal del Ángel respetaba al edificio en el que se alojaba, un imponente edificio neoclásico llamado Can Jorba, el primer edificio comercial del país en el que se instalaron escaleras mecánicas.
El Corte Inglés se instaló en 1998, y ahora, un cuarto de siglo después, dice adiós al edificio, recibiendo por él 200 millones de euros.
Este dinero lo ha pagado una sociedad formada por la gestora inmobiliaria Redevco y uno de los fondos de Ares, que han comprado el edificio a la espera de ultimar su futuro uso, que se espera que sea una mezcla entre usos comerciales y espacios para oficinas.