El Antic Teatre sobrevivirá. Cambiarán algunas cosas, seguro, pero este bar-teatro de las profundidades del Borne, símbolo de una forma de entender la ciudad, seguirá existiendo después de que su existencia haya estado amenazada durante años por la subida del alquiler que pretendían ejecutar sus propietarios, y que hacía inviable el negocio.
Ahora, el Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que comprará el Antic Teatre y lo incorporará al grueso de equipamientos culturales de la ciudad. Según el consistorio, el objetivo es salvagurdar un proyecto «único, de vanguardia y contracultural que la ciudad necesita».
De esta manera el espacio pasará a ser propiedad del Ayuntamiento en 2024, cuando se acabe el contrato de alquiler. El consistorio lleva tiempo negociando con una propiedad que pretendía subir el alquiler a 7500 euros, quintuplicando el precio actual. Con esta compra, en un par de años el Antic Teatre pasará a manos de la ciudad en proceso de compra similar al que vivió El Molino.
Así, el Antic anuncia que sobrevive justo cuando cumple 20 años, con una programación que celebra dos décadas que han quedado atrás y, ahora tambíen, las que queden por delante.