Finalmente fue posible. La Barça ganó este sábado su tercera Champions al derrotar a su bestia negra, el Olympique de Lyon, y erigiéndose como líder absoluto del fútbol mundial con su segunda Champions consecutiva.
Porque la victoria por 2-0 en San Mamés ante el equipo francés no sólo coronaba a las culés como campeonas de Europa, si no que certificaba el primer póker de títulos en una temporada de la historia del fútbol femenino, con las azulgrana ganando todos los títulos posibles: la Supercopa de España, la Liga F, la Copa de la Reina y esta UEFA Women’s Champions League.
La final tuvo, además, el componente poético con las dos grandes estrellas del equipo, Aitana Bonmatí y Alexia Putellas, marcando los goles de la victoria. Aitana, sucesora de Putellas, marcaba el gol inicial y, ya en el descuento Alexia, que había entrado en los minutos finales, certficaba su regreso por la puerta grande tras mucho tiempo afectada por lesiones, y marcaba un gol que cerraba el partido y cuya grabación ya forma parte de la historia del fútbol culé.
Una celebración sin rúa en Plaça Sant Jaume
La celebración de la Champions del Barça femenino ha despertado cierta polémica al no contar con rúa callejera, a diferencia de la del Barça masculino el año pasado.
La celebración se limitó a un acto institucional en el Ayuntamiento y a una pequeña rúa de als jugadoras, que caminaron desde Via Laietana hasta la Plaça Sant Jaume rodeadas de cerca de 2.000 aficionadas que se acercaron a felicitarlas.
Ya en el ayuntamiento las jugadoras, acompañadas de la junta directiva, fueron recibidas por el alcalde Jaume Collboni, que hizo su felicitación institucional.