Tras el desprendimiento el pasado domingo del talud que separaba la vía del ferrocarril de la línea de costa del Maresme, el plan de inversiones de Adif para este tramo se ha visto acelerado. Así se lo adelantó a El País la compañía ferroviaria, titular de la infraestructura, que tiene planeada una restauración de los 90 kilómetros de raíles en sus focos más problemáticos. No obstante, todavía se desconocen los plazos y los presupuestos concretos, sujetos a valoraciones técnicas.
Los detalles del incidente
El talud se desprendió a la altura de la playa y el hotel del municipio de Santa Susanna en la mañana del pasado domingo, día 27 de marzo. Debido al incidente, la circulación de trenes por este tramo estuvo suspendida hasta que pudo reestablecerse a primera hora del lunes. Las líneas de cercanías que se vieron afectadas fueron la RG1, entre Malgrat y Pineda de Mar, y la R1 de Rodalies. Para garantizar la movilidad de los viajeros durante el periodo en el que estas dos líneas permanecieron inoperativas se implementó un servicio complementario por la carretera entre Pineda y Blanes.
A pesar de la reparación, Adif explica que es temporal y que no descarta que puedan producirse otros desprendimientos durante futuros temporales, razón que le ha conducido a valorar las modificaciones en su plan de inversión. La solución por la que apuesta radica en el ensanchamiento de los diques para que funcionen como muro de contención.
Los problemas del litoral
La actual R1 de Rodalies, heredera de la vía férrea de Barcelona a Mataró, la primera de España, está bajo la amenaza constante de la subida del nivel del mar. Debido a este y otros factores, la zona ya estaba siendo considerada para su reforma previamente a este último temporal. No obstante, tal y como aclaró Adif, la envergadura de la actuación que se plantea ahora es mucho mayor.
Se toma como referente el ensanchamiento del rompeolas del tramo entre Mataró y Cabrera tras el temporal Gloria el pasado 2021. Las instituciones municipales del Maresme se han pronunciado en varias ocasiones ante el mal estado del litoral, causado en gran medida por la urbanización y el cambio climático, y por el deterioro de los servicios ferroviarios.