Buena parte de Sant Andreu se lamentó cuando conoció la noticia: la estación de Sant Andreu, un precioso edificio de 1854, testigo de una Barcelona desaparecida, cierra para dar paso a la nueva estación de Sant Andreu, que se construye en el marco de las obras de la Sagrera.
El lamento fue generalizado, pero ahora, según avanza La Vanguardia, hay un motivo para guardarse la tristeza: el inmueble no desaparecerá, sino que reabrirá como equipamiento municipal.
El espacio se cederá a la Hermandad Andreuenca, la asociación que agrupa varias expresiones de cultura popular arraigadas en Sant Andreu de Palomar. En un principio, se usará para almacenar los gigantes y otros cabezudos del barrio. Más adelante se espera que la estación se convierta en un equipamiento cultural que preserve de la imaginería festiva y cultural de Sant Andreu.
La idea, finalmente, para la la Hermandad Andreuenca, es crear la casa de la Fiesta Mayor para abrir el espacio al resto de entidades de cultura popular de Sant Andreu.
El edificio de la antigua estación de tren de Sant Andreu Comtal se contruyó de 1854 y es el edificio ferroviario en servicio más antiguo de España. Aunque ya se había decidido mantenerlo en pie a pesar de su cierre, estaba pendiente de decisión saber cuál sería su uso futuro.
La nueva estación de Sant Andreu solo estará a 100 metros de distancia de la antigua, pero ha sido necesario moverla para encajarla en el proyecto futuro de La Sagrera.
Quien visite la antigua, por cierto, podrá acercarse a mirar el mural ferroviario más grande del país, inaugurado hace un par de años.