Cualquiera que viva en Barcelona lo habrá vivido en algún momento. Una noche que uno espera tranquila de golpe un ruido, ya sea gente pasando, ya sea un coche, ya sea un grupo de fiesta nos despierta y nos desvela, dejándonos sin dormir y preguntándonos: ¿Qué he hecho yo para merecer esto?
Ahora una exposición nos confirma que esa sensación que tenemos de que en Barcelona hay mucho ruido no es cosa nuestra. «Shhh..», un proyecto expositivo de los Estudiantes del Máster en Data Design de Elisava ha reunido datos inéditos sobre la contaminación acústica de Barcelona revelando una dura verdad: En la ciudad 9 de cada 10 sonómetros de la ciudad marcan cifras por encima de lo recomendado.
La exposición la ha liderado Olga Quirós junto al estudio de arquitectura 300.000km/s y con los alumnos del máster ha reunido datos de Transparència del Ajuntament de Barcelona, descubriendo, por ejemplo, que de 2018 hasta ahora los problemas derivados del ruido se han multiplicado por cuatro, demostrando que, en Barcelona, el ruido es cada vez más un problema central.
Calles que destrozan sonómetros
Según los datos recogidos por la exposición, aunque las denuncias por ruido han subido, la media de ruido ha bajado en 1,7 decibelios en los últimos años. Pero eso no es suficiente para una ciudad donde, actualmente, el 9,7% de los 92 sonómetros superan los 65 decibelios recomendados de media diaria.
Hay puntos donde, directamente, esta media se pulveriza: La Plaça del Raspall en Gràcia (83db), es la más alta, y detrás vienen otras como Tuset (77 db), Escudellers (74 db), Meridiana (74 db) o Viladomat, a la altura de de Sant Antoni (75 db) y Enric Granados (71 db).
Tal y como explica Subirós en un reportaje del diari Ara, los sonómetros que respetan parámetros están en zonas muy residenciales y alejadas y que la cosa se complica por la noche o en fiestas mayores, cuando solo 6 sonómetros están por debajo de los niveles recomendados.
La exposición, que forma parte del festival Model, se inauguró el 20 de abril y se podrá visitar hasta el 9 de junio en la sala Ágora de Elisava.